domingo, 26 de agosto de 2007

La Soledad

Canción ultrapegajosa y buena, bájenla si no la han escuchado.

LA SOLEDAD

Esperaría que no te asuste,
este instante de sinceridad,
mi corazón,
vomita su verdad.

Es que hay una guerra entre dos,
por ocupar el mismo lugar,
la urgencia,
ó la soledad.

La soledad fue tan sombría que,
no te dejó encontrar tu naturaleza divina,
la urgencia ganó esta vez,
dispuesta a penetrarte, prepotente y activa.

Por las noches la soledad desespera,
por las noches la soledad desespera,
y por las noches la soledad desespera,
por las noches la soledad desespera.

Espera por tí,
espera por él,
espera por mi también,
y por aquel.

Y con violencia sujeta su alma,
a una brutal represión esperando apaciguarse,
ó confía en el paso del tiempo como otra solución
para encontrar la calma.

Pero te pone loco en las noches,
rogando entrar en los confines mas oscuros.
Después te arrodillas ante el amor maternal
suplicando ternura.

Por las noches la soledad desespera,
por las noches la soledad desespera,
que por las noches la soledad desespera,
por las noches la soledad desespera.

Espera por tí,
espera por él
espera por mí,
también por aquel.

Y espera.

Y que hace este angelito ahora,
a las seis de la mañana,
su vida al mastil de este naufragio,

A ver si alzando las copas foragidas
viene del cielo de enfermeras,
para lamer sin asco las heridas.

Por las noches la soledad desespera,
haber si viene del cielo,
por las noches la soledad desespera,
una enfermera del amor.


domingo, 19 de agosto de 2007

Del sentimiento trágico de la vida

Extracto del libro de Unamuno que le da el nombre a esta entrada [favor, dirigir la mirada hacia el título]. Lo estoy recién empezando a si que puede que aparezcan más citas por acá...

Kechu




Todo lo que en mí conspire a romper la unidad y la continuidad de mi vida, conspira a destruirme y, por lo tanto, a destruirse.[...] Porque para mí, el hacerme otro, rompiendo la unidad y la contiunidad de mi vida, es dejar de ser el que soy, es decir, es sencillamente dejar de ser. [p.34]

jueves, 16 de agosto de 2007

Cuando te conocí

...Y en el fondo es tan hondo mi dolor
porque me voy, y no se puede cambiar
de corazón como de sombrero
sin haber sufrido primero
en el fondo es tan hondo mi dolor
porque me voy, y no se puede cambiar
de corazon como de camisa
sin perder la sonrisa.-